El domingo, el nuevo tramo de Jacks Ridge fue una de las revelaciones del fin de semana del Repco Rallye de Nueva Zelanda, con el Wolf Power Stage elogiado por los pilotos.
El tramo de 6,77 kilómetros, que se disputó en dos ocasiones el último día de la prueba con sede en Auckland, había sido construido por el propietario local Andrew Hawkeswood para preparar el regreso de Nueva Zelanda al Campeonato del Mundo de Rallyes.
El piloto de M-Sport Ford, Craig Breen, dijo: «Cuando acabé los reconocimientos y has visto todas estas increíbles pistas, me preguntaba un poco sobre Jacks Ridge.
«Pero pilotar en el rallye fue fantástico. Se podían utilizar los peraltes en las curvas y los saltos eran muy buenos. Y ver a tanta gente, a tantos espectadores y aficionados, fue estupendo, ¡y la carretera se intuía natural!»
Ott Tänak, que terminó tercero en la general con un Hyundai i20 N, también quedó impresionado con el tramo y elogió al equipo de Hawkeswood.
«Normalmente estos tramos artificiales no son tan divertidos», dijo, «pero este era realmente divertido con todo tipo de saltos que estaban realmente bien construidos».
«Era un buen trozo de carretera y, al mismo tiempo, un reto para el pilotaje. Este tipo debe tener mucho talento si puede construir carreteras así».
Se agotaron las entradas, con cerca de 15.000 aficionados que asistieron a lo que resultó ser el tramo de coronación del campeón de pilotos Kalle Rovanperä, que marcó el tiempo de referencia para sellar su título.
Hawkeswood dijo: «Tenemos mucha suerte de tener este terreno para trabajar. Sabía lo que quería del tramo, ya que he sido espectador en Finlandia y tenía una idea de cómo quería enviar los coches de lado sobre los saltos.
«Estoy muy contento de cómo ha salido todo. La lluvia que tuvimos el día anterior a la prueba causó algunas preocupaciones, pero trabajamos hasta el sábado por la noche para revisar el sistema de gestión del drenaje y al final todo el mundo se lo pasó muy bien».
