La Sala de Prensa del Gran Canaria Arena de Las Palmas de Gran Canaria acoge en la mañana de este sábado la Asamblea de la Federación Insular de Automovilismo de Las Palmas, donde 58 de los 65 asamblearios citados eligen al nuevo presidente, entre Miguel Ángel Toledo y Miguel Ángel Domínguez.
Con la ausencia de Juan Hernández, presidente de la Junta Electoral, se arrancó con la recusación por parte de Toledo de Eugenia Pérez Curbelo, miembro de la Junta Electoral de la Federación Canaria de Automovilismo -a propuesta por la Federación Interinsular de Automovilismo de Las Palmas- y secretaria de la Sección de Las Palmas.
Mucha tensión ocasionó esta situación puesto que, al presentar dicho documento en el mismo momento de celebrarse la Asamblea, Curbelo entendió que sí tenía voz y voto al no haberse presentado dicho escrito a la Federación en tiempo y forma. Tato Suárez, interventor de Toledo, le recriminó no respetar la recusación, cuyo intercambio de opiniones entre Toledo y Suárez con Curbelo propició que fueran varios los asamblearios que decidieron levantarse y macharse ante el bochorno generalizado.
Finalmente, a pesar de la presión de Toledo de que si Curbelo estaba presente impugnaría las votaciones y ante el importante malestar de los allí presentes, que se quejaron amargamente, especialmente Aythami Santana y Pepe Monzón, que pidieron que se parara el intercambio de opiniones y les dejaran votar, se procedió a que cada uno de los candidatos procedieran a explicar su programa durante 20 minutos, empezando Toledo y continuando Domínguez.
Toledo acusó en su intervención a Curbelo por ser abogada personal de Domínguez, algo que éste negó en rotundo.