La Copa Pirelli AMF llegaba a Salvaterra de Miño para celebrar la prueba que marcaba el ecuador del certamen, una cita complicada que iba a resultar clave en las opciones de muchos equipos al título y que contaba con el regreso de varios pilotos vencedores, caso de Diego Vila, Sergio Otero ó el campeón de 2017 Heriberto Atán.
Diego Vila daba la sorpresa con el scratch en una complicada primera especial donde la intensa lluvia fue protagonista y mantenía el liderato durante el bucle pese a la presión de Marcos Sanromán y la de Dani Álvarez, que en el tercer tramo sufría una fea salida de carretera y se saldaba con magulladuras para él y su copiloto Joel Souto, que tuvieron que ser asistidos por los servicios médicos. Otro que terminaba antes de tiempo por salida de carretera en la primera especial era Heriberto Atán.
Sanromán pasaba al ataque en la segunda sección, instalándose en el liderato con 7 segundos sobre Vila, mientras Juan Carlos Pampillón se asentaba en la tercera plaza a 20 segundos, pero al comienzo de la tarde la caja de cambios de su Peugeot 106 decía basta, viéndose obligado a la retirada. Francisco Pazos y Sergio Otero luchaban entonces por ese último peldaño del podio de cara al último bucle.
En esa última sección Diego Vila no daba su brazo a torcer, intercambiando scratchs con Sanromán y saliendo a la última especial separados por 12 segundos. Una salida de carretera de Vila daba al traste con su espectacular regreso y certificaba la victoria en manos de Sanromán, que acompañado por Unai Conde se distancia de todos sus rivales en el certamen, que sumaban un cero aquí.
Heredando la segunda posición, Fran Pazos lograba su mejor resultado de la temporada, mientras Sergio Otero, inicialmente tercero, se veía perjudicado por una penalización que le relegaba a la quinta plaza. Marco Lorenzo fue el integrante de ese último peldaño del podio (que le asciende a la misma posición en la tabla de puntos), seguido por Pablo Sánchez, de nuevo con una muy buena actuación al volante del Suzuki Swift.